Chakras para principiantes - reseña crítica

Esta es una guía completa que explora el sistema de los chakras y cómo influyen en la salud física, mental y emocional. El libro introduce los conceptos básicos de los siete chakras, explicando su función y ubicación en el cuerpo humano.

El autor proporciona técnicas prácticas para equilibrar y sanar el cuerpo a través de los chakras: meditación, respiración, visualización, el uso de cristales o aceites esenciales y hasta posturas de yoga específicas para cada uno. También se incluyen ejercicios para identificar desequilibrios en los chakras y consejos para incorporar hábitos saludables en la vida diaria que promuevan su alineación y armonía.

Además, el libro explica cómo se relacionan los chakras con diferentes aspectos de la vida, como las relaciones personales, la creatividad, la manifestación de deseos y metas para alcanzar una vida más plena.

El cuerpo sutil: canales en la práctica espiritual

Los chakras son puntos energéticos pertenecientes a un “cuerpo sutil”, a través de los cuales se reflejan las vivencias internas y externas. Además influyen tanto en el plano físico como en el espiritual. 

Estos chakras, ubicados entre la última vértebra de la columna hasta la coronilla, tienen funciones y significados específicos para la mente, el cuerpo y el desarrollo espiritual. A través de ellos el cuerpo es atravesado por canales de energía que afectan al equilibrio físico y emocional.

Sin embargo, existen una serie de prácticas que pueden aplicarse para despertar la energía y elevarla hacia el punto superior de la cabeza. Este proceso busca restaurar el equilibrio y eliminar bloqueos, promoviendo así la estabilidad y armonía. 

El balanceo de los chakras y la apertura de los chakras son dos cosas distintas. Al principio, no es una buena idea tratar de abrir los chakras de par en par. Un enfoque tan incauto te dejará vulnerable a las personas sin escrúpulos y a las energías negativas.

Según explica, el proceso debe ser constante y gradual, de esta manera es posible alcanzar la máxima meta espiritual, que es la realización de la conciencia pura e inmutable, representada por Shiva, y su unión con la energía dinámica de la vida, representada por Shakti. 

Este estado de unidad y consciencia trasciende la dualidad y conduce a la comprensión de que cada individuo es una expresión única de la conciencia universal.

Trabajando con los chakras

El cuerpo sutil tiene múltiples complejidades y no existen atajos mágicos para abrir los chakras o alcanzar una conexión espiritual genuina. Hacerlo prematuramente puede ser peligroso. Por eso, se recomienda una práctica constante y paciente, con ejercicios de yoga y con ayuda de cristales, semillas, hierbas y aceites naturales que abonen al auto-conocimiento y las necesidades de cada chakra.

El despertar del Kundalini puede ocurrir intencional o involuntariamente, pero su reconocimiento y su puesta en práctica debe ser gradual y equilibrada. El Hatha Yoga resulta fundamental para purificar y entrenar el cuerpo físico, con una lista de asanas útiles para cada chakra, que abran la conexión con la espiritualidad.

Puedes acercarte al Pranayama, que es una forma de controlar la energía sutil a través de la respiración, con un enfoque en la respiración alternativa de la nariz como una práctica segura para principiantes. 

Además, existen los samskaras, impresiones dejadas en los chakras por experiencias pasadas, puedes trabajar en ellos ya que es fundamental antes de avanzar en prácticas espirituales más intensas.

Por último, puedes acudir a la visualización. Es una herramienta para trabajar con los chakras, con una guía detallada sobre cómo dirigir la atención a cada uno de los chakras principales, desde la raíz hasta el tercer ojo, con la intención de equilibrar y purificar su energía a través de sus formas y colores.

Los siete chakras

• Muladhara (Chakra Raíz):

El Muladhara, ubicado en la base de la columna vertebral, se considera el fundamento del sistema. Se ilustra con un loto rojo de cuatro pétalos y está asociado con el elemento tierra, simbolizando la estabilidad y seguridad. Se relaciona con las funciones básicas de supervivencia y los instintos básicos, como la búsqueda de seguridad financiera y física. Cuando está desequilibrado, puede manifestarse con inseguridades y preocupaciones materiales. Sin embargo, un Muladhara equilibrado proporciona una sensación de arraigo y seguridad en uno mismo.

• Svadishthana (Chakra Sacral):

El Svadishthana está situado en la región pélvica. Representa la sexualidad, la pasión y la creatividad. Este chakra se visualiza como un loto naranja de seis pétalos y está asociado con el elemento agua, que simboliza el flujo de emociones y la energía pasional. Cuando está desequilibrado, pueden surgir problemas vinculados a la sexualidad como traumas o represión emocional. Sin embargo, un Svadishthana equilibrado permite una expresión saludable de deseos y creatividad.

• Manipura (Chakra del Plexo Solar):

El Manipura, situado encima del ombligo, representa la fuerza de voluntad, el propósito y la autodeterminación. Representado por un loto amarillo de diez pétalos, este chakra está asociado con el elemento fuego, simbolizando la transformación y la acción. Los desequilibrios en este chakra pueden manifestarse como ansiedad o falta de confianza. Un Manipura equilibrado habilita una expresión clara y saludable de la voluntad.

• Anahata (Chakra del Corazón):

El Anahata, en el centro del pecho, representa el amor universal, la compasión y el desapego. Representado por un loto verde de doce pétalos, este chakra está asociado con el elemento aire, simbolizando la libertad y la expansión. Sus desequilibrios pueden manifestarse a través del miedo a la soledad o la amargura. Un Anahata equilibrado promueve la generosidad, la sensibilidad y la empatía.

• Vishuddha (Chakra de la Garganta):

El Vishuddha, en la región de la garganta, representa la comunicación clara, la sabiduría en la palabra y la pureza en el habla. Representado por un loto azul claro de dieciséis pétalos, este chakra está asociado con el elemento espacio, simbolizando la apertura y la expresión. Los desequilibrios pueden manifestarse como incapacidad para expresarse o mal uso de la comunicación. Un Vishuddha equilibrado promueve una comunicación clara, compasiva y atenta.

• Ajña (Chakra del Tercer Ojo):

El Ajña, ubicado entre las cejas, representa la intuición, la sabiduría y el “tercer ojo”. Representado por un loto de dos pétalos de color añil, este chakra simboliza la percepción y la comprensión. Los desequilibrios pueden manifestarse como fantasías exageradas o rigidez en las creencias. Un Ajña equilibrado promueve una claridad mental, percepción intuitiva y comprensión profunda.

• Sahasrara (Chakra de la Corona):

El Sahasrara, en la coronilla de la cabeza, representa la conexión con lo absoluto y la conciencia pura. Representado por un loto de mil pétalos de múltiples colores, este chakra está asociado con la conciencia suprema y la conexión universal. Los desafíos asociados con este chakra son inconcebibles desde una perspectiva ordinaria. Un Sahasrara equilibrado puede llevar a la iluminación y la identificación con lo absoluto.

Equilibrando los chakras 

• Muladhara (Chakra Raíz):

Para equilibrar el Muladhara, es fundamental reconectar con la tierra y fortalecer una sensación de seguridad y fertilidad. Hacer actividades al aire libre de manera rutinaria, practicar las posturas de yoga que otorgan sensación de estabilidad.

• Svadishthana (Chakra Sacral):

El equilibrio del Svadishthana depende de la relación con la creatividad y la sexualidad. Actividades que contacten con la propia sensualidad, el erotismo y la expresión creativa (desde la danza hasta el deporte) pueden ser muy útiles para mantener un cuerpo en armonía, así como fortalecer y darles vida a las relaciones con uno mismo y con los demás. 

• Manipura (Chakra del Plexo Solar):

El equilibrio del Manipura depende del autoestima y la voluntad personal. Participar en espacios comunitarios, donde seguir la propia voluntad y sentirse seguros, practicar la cooperación, mantener una postura fuerte y segura en el yoga, son algunas técnicas para mejorar la presencia sin perder de vista las voluntades de los demás. 

• Anahata (Chakra del Corazón):

Para equilibrar el Anahata es importante compartir tus sentimientos con las personas cercanas, es necesario reconocer y gestionar las emociones tormentosas, como la tristeza excesiva y la ira a través de la palabra y el ejercicio espiritual. Practicar la expresión emocional honesta y saludable, como compartir tus sentimientos con los seres queridos o meditar, puede ser beneficioso.

• Vishuddha (Chakra de la Garganta):

El equilibrio del Vishuddha requiere de una ejercitación del habla y la vinculación con la palabra escrita. Para fortalecerlo, es recomendable leer a diario, mantenerse informado, aprender otro idioma o tomar lecciones de canto para desarrollar habilidades verbales. Practicar la atención plena en el habla y prestar atención a tus emociones y tus reacciones físicas al hablar también puede ser útil. 

• Ajña (Chakra del Tercer Ojo):

El desequilibrio en el chakra del tercer ojo puede manifestarse como falta de imaginación o excesivo cinismo espiritual. Para equilibrarlo, puedes recordar y analizar tus sueños, prestar atención a las coincidencias significativas y evitar el uso excesivo de sustancias que alteren la conciencia. Confiar en tu instinto de una manera atenta, también puede ser beneficioso.

• Sahasrara (Chakra de la Corona):

El chakra de la corona está conectado con lo divino y el propósito de la vida. Para equilibrarlo, puedes participar en actividades espirituales como la meditación y la oración, la fe, la conexión física y emocional con el universo, leer sobre las vidas de grandes maestros espirituales para encontrar inspiración. También puedes usar más ropa blanca y piedras preciosas blancas para conectar con este chakra.

Equilibrar los chakras con aceites, hierbas y sílabas

Hay innumerables maneras de equilibrar los chakras, algunos de ellos son métodos suplementarios. El uso de aceites esenciales e inciensos no solucionará ningún problema serio, pero puede soportar los otros tipos de trabajo que haces para equilibrar los chakras y una forma es a través de la aromaterapia. Puedes quemar incienso o calentar aceites esenciales para promover el funcionamiento sano de los chakras.

Hay sonidos y sílabas-semilla que también pueden ayudarte. El mantra más famoso es el simple sonido “Om”, el sonido primordial del cosmos que expresa la realidad absoluta y suena a través de todas las cosas, puedes sintonizar su frecuencia. 

Del mismo modo, la antigua concepción yóguica de la realidad dice que ciertos sonidos vocales se sintonizan con ciertos niveles de experiencia. Así que cada uno de los chakras tiene su propio sonido, y recitando o entonando su sílaba semilla, puedes conectarte a su energía.

Una forma de hacer esto es sentarte y meditar: cierra tus ojos, y entona la sílaba semilla apropiada de cualquier chakra con el que quieras trabajar. Puedes recitar las sílabas semilla en conjunción con la meditación mientras visualizas la forma y el color del chakra con el que trabajas.

Durante milenios, la ciencia médica del Ayurveda ha sido practicada en la India como una manera de sanar el cuerpo y promover un enfoque holístico y preventivo a la salud del cuerpo y la mente. El Ayurveda se ocupa en parte de la energía del cuerpo y es un gran suplemento a las prácticas que trabajan con los chakras y el sistema de energía sutil.

Varias hierbas resuenan con la energía de determinados chakras y pueden ser utilizadas para sanarlos y equilibrarlos.

Notas finales

Es sumamente importante abordar la práctica espiritual con precaución y acompañamiento adecuado, existen muchos peligros de la imprudencia o el apuro. Existen los "malos gurús" y tienes que buscar guías auténticamente interesadas en el crecimiento espiritual de sus alumnos.

La meditación es una herramienta poderosa para el crecimiento personal y se compromete a compartir su misión de ayudar a otros a encontrar paz y felicidad a través de la práctica espiritual.

Consejo de 12min 

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